Ecumenismo farisaico

El jueves 11 de octubre de 2012, la Pontificia Universidad Católica Argentina concedió el Doctorado Horroris Causa al rabino Abraham Skorka.

Estuvieron presentes en el Auditorio del Beato Papa Juan Pablo II de la P.U.C.A., entre otras muchas ilustres personalidades de los mundos académico y eclesiástico, el Cardenal-Arzobispo de Buenos Aires y Primado de Argentina, S.E.R. el Dr. don Jorge Mario Bergoglio, S.J.,  el Predicador de la Casa Pontifica, el Excmo. Dr. don fray Raniero Cantalamessa, O.F.M.Cap., y el Nuncio Apostólico de la Santa Sede, S.E.R. el Dr. don Emil Paul Tscherrig.

Es indudable que la concesión de este Doctorado Horroris Causa cuenta con el beneplácito explícito tanto la Santa Sede como del Santo Padre Benedicto XVI.

En su discurso laudatorio de justificación de la concesión de este Doctorado Horroris Causa al homenajeado rabino Abraham Skorka, el Excmo. e Ilmo. sr. Rector Magnífico de la P.U.C.A., el r. Dr. don Víctor Manuel Fernández dijo:

"tenemos en común el tesoro de la Torah, lo que los cristianos llamamos Antiguo Testamento. Cristianos y judíos recibimos esa Palabra en tradiciones distintas que permiten a esa Palabra revelada desarrollar diversas potencialidades."

A lo que Antonio Caponetto, en "Página católica", responde que:

"Para nosotros las sagradas páginas veterotestamentarias anuncian a Cristo, Segunda Persona de la Santísima Trinidad, ante el cual se dobla toda rodilla en los cielos y en la tierra. A los judíos en cambio, les sirvió y les sirve para justificar la muerte de los profetas y del mismo Dios. Pequeño detalle sin importancia."

Continúa el Excmo. e Ilmo. sr. Rector Magnífico de la P.U.C.A. diciendo que:

"en el Concilio Vaticano II se abrió una puerta que dio lugar a un creciente acercamiento entre la Iglesia Católica y el Judaísmo. El Vaticano II expresa en la declaración Nostra Aetate: “Como es tan grande el patrimonio espiritual común a cristianos y judíos, este Concilio fomenta y recomienda el mutuo conocimiento y aprecio… consciente del patrimonio común con los judíos…" (Nostra Aetate, §4)"

A lo que Antonio Caponetto responde que:

"Sabemos que la promesa divina, en virtud de la cual, 'mis palabras no pasarán' (Mt. XXIV, 35), no está aplicada a Nostra Aetate sino a la buena nueva del Nuevo Testamento...'¡Matásteis al Autor de la Vida!' (Hechos III, 13-15), '¡Crucificásteis al Señor de la Gloria!' (1 Cor. II, 8).

Sigue el Excmo. e Ilmo. sr. Rector Magnífico de la P.U.C.A. diciendo que:

"En este comienzo del Año de la Fe que celebramos los católicos, la figura y la palabra del Rabino Skorka es una potente confesión de fe en un Dios personal que actúa en la historia..."

A lo que Antonio Caponetto responde con la oración de la Liturgia de Viernes Santo según el Misal del Beato Papa Juan XXIII (1962):

"Oremos también por los pérfidos judíos para que Dios Nuestro Señor quite el velo de sus corazones, a fin de que también ellos reconozcan a Jesucristo Nuestro Señor."

Tras leer semejante noticia, no es extraño que un lector del blog "Página católica" se pregunte:

"¿Dónde está el verdadero cisma...? ¿Dónde está la herejía...? ¿Dónde la apostasía...?"

¿Es así como hemos de entender y aplicar eso que ha sido dado en llamar 'Herméutica de Continuidad de la Tradición Viviente" con el Magisterio que la Iglesia ha enseñado siempre y en todas partes, tal y como enseñaba el Padre de la Iglesia San Vicente de Lérins?"

Pues mientras no me lo expliquen mejor, tanto en la reflexión teológico-filosófica como en la práxis eclesio-pastoral, para mí, esa "Herméutica de Continuidad de la Tradición Viviente" es un simple flatus vocis.

O séase, nada .